viernes, 12 de abril de 2013

Carretera secundaria


Toda aquella historia que quise tener se me escapó de las manos. Hoy es uno de esos días en los que piensas que no encontraras otra novela igual. Me pregunto si el mensaje de los personajes no tenía sentido, si todo lo que se repetía una y otra vez se quedó en silencio, como si los protagonistas hubiesen enmudecido. Me pregunto si las carreteras secundarias, me llevan a circunvalaciones sin salidas o a alguna vía de servicio en las que escucho nuevas voces que narran una nueva historia.

jueves, 11 de abril de 2013

Disconforme con mi uniforme


A veces siento envidia de aquellas personas que pasan por la vida sin ninguna meta. Aquellas que con un simple trabajo, unida a la primera persona que se cruza, una casa hecha un desastre, unas palomitas en la barriga y a dormir son felices. La gente que no desea nada para el año nuevo, que le da igual el coche que tenga y que disfruta como puede de las vacaciones. Me gustaría por unos días ser menos exigente, no querer dar tanto a mi vida y conformarme con lo primero. Que fácil sería todo si aceptara las cosas como vienen, tan solo vivir para disfrutar. Eso no lo venden en ningún lado verdad?.

jueves, 4 de abril de 2013

Saciar el hambre.

Tengo hambre, porque mi anterior bolsa de patatas se ha acabado ya que estaba medio vacía. Piensas que si compras otra bolsa te la vas a comer tranquilamente. La abres y empiezas a comer. A medida que vas comiendo te vas dando cuenta de que el hambres se ha saciado antes de lo que pensabas. la gula y el deseo de llenarme ha hecho que me equivoque y ahora tengo una bolsa medio llena que no se que hacer con ella. Si pasa el tiempo, quizá quiera saciarme, o quizá no. Quizá se pongan rancias y no las pruebe más.

Para la próxima ocasión tendré cuidado en no comprar la bolsa de patatas equivocada.

martes, 2 de abril de 2013

Piloto automático

Se me ha roto el pilotito que te indica si el coche derrapa o no. Cada vez que el coche hace un ligero movimiento se enciende y ya no se apaga. Hasta que no apagas y vuelves a dar al contacto del coche, no se quita.

Siempre en el recuerdo el piloto amarillo que te recuerda que esta roto y que el minimo movimiento vuelve a estar ahi, molestando. No sabes como quitarlo y te pones nervioso porque quieres que no este ahí.

Los coches por suerte tienen arreglo para esas cosas.

lunes, 1 de abril de 2013

Un chicle usado.

La vida hace que las personas vengan y vayan. Muchas de ellas te marcan la vida, otras ni te das cuenta que han pasado, a pesar de compartir vivencias a diario durante mucho tiempo. La decepción es una de las características que pueden surgir después de ese tiempo.

No soy muy de comer chicle. Muchos de ellos son una mierda, tienes el sabor durante muy poco tiempo y luego son insípidos  y lo único que haces es hacerte masticar si darte cuenta de que el sabor ya se fue hace ya mucho tiempo. Cuando te das cuenta de ello, se suele hacer dos cosas, tragártelo, o tirarlo.

Es verdad, dicen que tragarse el chicle es malo, pero muchos nos tragamos el chicle para no ensuciar, para no dar la nota, para disimular, y que no se note. Prefiero eso que tirarlo en un cubo envuelto en un papel y que con una supuesta delicadeza te olvides de ello. Es más prefiero tirarlo al suelo, que lo pisoteen y que se haga uno con la baldosa.

Hay muchos chicles en el suelo, y siguen estando ahí. Los de la basura, ya no se sabe donde están.